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Dos de los detenidos admiten la compra y manipulación de sustancias explosivas para “meter ruido” el 1-O
Los siete CDR detenidos el pasado lunes por la Guardia Civil han declarado hoy ante el juez, y tras escuchar la versión de los hechos, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado prisión sin fianza para todos los miembros del colectivo independentista.
Según apuntan diferentes medios de comunicación, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo ha sido la persona que ha pedido prisión para los detenidos al juez instructor, Manuel García Castellón.
Preparación de artefactos explosivos
Tras ser arrestados por la Guardia Civil, dos de los CDR admitieron haber comprado y realizado pruebas para la fabricación de artefactos con el objetivo de “meter ruido” el próximo 1-0. La fecha es especial para los independentistas, ya que es el día que se celebró el referéndum ilegalizado hace dos años por el Tribunal Constitucional.
Las detenciones efectuadas el pasado lunes en diferentes puntos de la geografía catalana forman parte de la ‘Operación Judas’, una acción llevada a cabo por más de 500 agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad. Durante los registros se incautaron documentos, material informático y sustancias susceptibles de ser utilizadas en la fabricación de artefactos explosivos.
Los registros se produjeron en diez domicilios de los municipios de Mollet del Vallès, Sant Fost de Campsentelles, Cerdanyola del Vallès, Sant Vicenç de Torelló, Sabadell y Santa Perpètua de Mogoda.
Bajo secreto de sumario
Los abogados detenidos han solicitado acceder a los interrogatorios de los otros arrestados pero no se les ha permitido porque la causa está bajo secreto de sumario.
El juez ha decidido asignarle este estatus gracias al artículo 302 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El caso es que cuando se trata de un delito público, el juez puede acordar declarar total o parcialmente secretas para todas las partes personadas unas diligencias por plazo no superior a un mes.
