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Elena Ocaña, Mayka Solano o Estrella Donate son algunos nombres destacados de la cartomancia y videncia en Cataluña
La pandemia mundial del Covid-19 ha generado una cantidad de incertidumbres a la población sin parangón. Son muchas las personas que intentan resolver sus dudas acerca de distintos temas: exceptuando la salud, las respuestas de la cual deben proceder de la medicina, la gente se preocupa estos días por la economía, por las relaciones sociales o por el amor. Y una buena opción para hallar el camino correcto a todas estas preguntas son, como siempre, las cartas del tarot.
Ahora bien: como en todo, no siempre la totalidad de los servicios o los profesionales que se dedican a ello son válidos. Siempre, y más aún en contextos como el que vivimos a día de hoy, hace falta afinar con buen criterio a la hora de escoger una buena tarotista, y en este sentido el abanico se limita con creces.
Algunos, llegado a este punto, ya habréis formulado la pregunta clave: ¿Y cómo conseguimos dar con una buena vidente? Lo que antes estaba más relacionado con el azar, ahora, con las nuevas tecnologías, se puede conseguir de un modo mucho más rápido, sencillo y eficaz. Así, plataformas web como tarotistabuena.tel brindan una serie de nombres referenciales de profesionales del tarot, todo ello debidamente segmentado por población.
En Barcelona y alrededores, por ejemplo, una opción muy recomendable es Elena Ocaña, una de las jóvenes promesas del tarot que sigue una larga y prolífica saga familiar vinculada con la videncia y la cartomancia. Ocaña, dado que es una vidente de nacimiento sin gabinete, atienda a cada persona de forma personal, y para ello dispone del apoyo de un ayudante que coordina su agenda. Su prioridad, explica, es poder hablar personalmente con el cliente, un paso que sólo en episodios de extrema gravedad se puede saltar.
Elena es uno de los nombres más destacados del tarot catalán, pero no es el único. Así pues, videntes como Mayka Solano, Estrella Donate o Silvia Santolaria confeccionan un elenco de profesionales que, cada una con su estilo y sus procedimientos particulares, han alzado la reputación y la imagen del tarot en los últimos años.
